Volvemos de las vacaciones y llega el momento de retomar el Control Económico y Financiero de nuestras empresas.
Hoy es 31 de agosto y para muchos de nosotros será el último día de las vacaciones. Esto implica que mañana día 1 de septiembre debemos volver a la empresa, pisar tierra y retomar el control financiero de nuestros números.
Durante el mes de marzo y abril estuvimos proyectando el medio plazo, trabajando distintos escenarios, sobre la evolución de las empresas a lo largo del año, puesto que el nivel de incertidumbre era y sigue siendo muy alto.
Con el repunte de infecciones provocadas por el COVID19 y las medidas que desde las distintas administraciones se están tomando, no cabe otra que seguir trabajando en el control financiero de nuestras empresas. Debemos trabajar para afinar y actualizar aquellas magnitudes e indicadores claves para nuestra gestión como responsables financieros.
Varias son las dimensiones sobre las que hay que trabajar. Posteriormente habrá que someterlas a los distintos escenarios que tengamos como mas probables, y de este modo tener la suficiente flexibilidad para adoptar las mejores decisiones:
Dimensión Margen Bruto
Empezaremos revisando las ventas y los costes variables. En primer lugar debemos actualizar nuestras previsiones tanto de las unidades de ventas estimadas como de los precios asociados. Es posible que la caída de la demanda nos provoque que tengamos que revisar nuestras políticas de pricing para adaptar el producto o servicio a las nuevas circunstancias.
Con ello se verá afectado el coste de las ventas. Tendremos que analizar los nuevos márgenes resultantes y asegurarnos que estos son los adecuados para soportar el resto de la estructura.
Dimensión Gastos Fijos
En caso de que el Margen Bruto caiga, la revisión de los gastos fijos es obligatoria. Debemos eliminar cualquier gasto superfluo que no aporte valor, externalizar servicios o incluso variabilizar algunos gastos fijos, vinculándolos bien a las ventas o bien al margen. El análisis de los gastos fijos es muy importante para el control económico y financiero de la empresa.
Gracias a los ERTEs las empresas han podido sobrevivir estos meses, al reducir sus gastos de personal. Probablemente esta política haya que extenderla, y ahí tenemos que estar preparados para plantar estos escenarios para el caso en que sea necesario.
Dimensión Cash Flow
Otra dimensión del control económico y financiero de nuestra empresas es la tesorería. Muchas empresas mueren por la caja. Hacer un ejercicio de proyección de tesorería es clave para detectar si estaremos en condiciones de responder a nuestros compromisos.
Es probable que tengamos que negociar con proveedores para alargar nuestro período de pago, o acortar el de clientes. Del mismo modo habrá que acostumbrarse a trabajar con menos stock en almacén, todo ellos para reducir las Necesidades Operativas de Fondos.
Caso especial es el de los Préstamos ICO. El endeudamiento provocado por los préstamos ICO avalados por el Estado, es un arma de doble filo, que nos puede ahogar financieramente, por lo que debemos tener nuestras previsiones de tesorería actualizadas para garantizar su devolución.
Dimensión Financiación
Las necesidades de financiación es otra de las dimensiones clave para llevar un férreo control económico y financiero de nuestras empresas. En unos escenarios donde la demanda caerá y se producirán constantes quiebras, hay que asegurar que tenemos los recursos suficientes para responder de nuestros compromisos.
Especial importancia cobra la financiación del circulante, ya que es posible que los saldos de clientes bien se eleven al incrementarse el periodo de cobro, y por otro lado los proveedores nos quieran reducir el período de pago, lo que nos llevará a revisar nuestra política de financiación a corto plazo.
Dimensión Capex
En relación a las inversiones en activos fijos la reflexión debe ser la siguiente: Bajo este escenario de incertidumbre, el análisis pormenorizado de retorno sobre la inversión se hacer imprescindible, y se hace necesarios establecer unos conservadores escenarios de retorno del capital.
Del mismo modo debemos tener claro cómo vamos a financiar las nuevas inversiones, para no poner el riesgo la solvencia de la empresa. Y aquí debemos trabajar con los financiadores en cuanto a importe a financiar, plazos y coste.
Dimensión Fiscal
Por ultimo, la dimensión fiscal de la empresa abarca todos aquellos compromisos con las Administraciones. Escenarios estimados de cierre contable, aplazamientos de obligaciones con la seguridad social y hacienda así los pagos a cuenta, deben ser igualmente tenidos en cuenta en nuestros previsiones para garantizar el control económico y financiero.
Potencia sin control no sirve de nada. Por lo tanto, destinemos recursos necesarios y suficientes para garantizar el Control Económico y Financiero en nuestras empresas en estos tiempos tan convulsos.
El equipo de Solrentia
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